El polen de abeja es uno de esos complementos alimenticios que no deberían faltar en una dieta saludable. Sus valores nutricionales lo han convertido en un superalimento cargado de beneficios para nuestra salud, ¿sabías que los seres humanos llevamos siglos tomándolo? Los antiguos egipcios ya conocían sus propiedades, de ahí que le pusieran el sobrenombre de “el polvo de la vida”. Desde entonces hasta ahora, se ha consumido por todos aquellos que buscan una alimentación equilibrada que le aporte al organismo los nutrientes necesarios para funcionar de manera óptima, pero no todo el mundo conoce este alimento. ¿Eres uno de ellos? Pues sigue leyendo para descubrir todos sus secretos.
¿Qué es el polen de abeja?
El polen de abeja procede de las flores, y se encuentra en las antenas de sus estambres. Estos granos tienen una función muy importante: la reproducción de las plantas. Cuando las abejas visitan las flores, recogen estas pelotitas, que se humedecen con el néctar que recolectan, haciendo que se acumulen y dándoles su forma y apariencia características. Cuando vuelven a la colmena llevan con ellas este polen apícola, ya que es su principal alimento proteico. Para conservarlo, lo almacenan en las celdillas y lo recubren con miel, generando una transformación derivada de la fermentación que da como resultado lo que se conoce como “pan de abeja”.
En Miel LAPUELA sabemos que el polen es indispensable para la salud y el buen desarrollo de las abejas y, por eso, solamente cosechamos el excedente que no van a aprovechar. Estos insectos son demasiado previsores, por lo que acumulan en su colmena una cantidad mayor de la que en realidad van a necesitar, ¡igual que muchos humanos! Así que no te preocupes, nuestras pequeñas amigas y tú podéis disfrutar de los numerosos beneficios de este alimento sin temor, hay más que suficiente para todos.
Beneficios del polen de abeja
Ahora que ya sabemos lo que es y cómo se obtiene, vamos a hacer un pequeño repaso a los principales beneficios que aporta el polen de abeja y que lo han convertido en el complemento alimenticio ideal. En su composición se encuentran más de 250 sustancias, entre las que destacan las proteínas, los aminoácidos, los lípidos, los hidratos de carbono, la fibra, los minerales, las vitaminas y los flavonoides, que son nutrientes vegetales que ayudan al organismo a reparar el daño producido por los agentes oxidantes, como los rayos UVA o la polución medioambiental.
Siguiendo lo anterior y, teniendo en cuenta que diferirá en función de la planta de la que proceda, en líneas generales podemos decir que contiene aproximadamente un 40% de azúcar, un 20% de proteínas y un 2% de grasas. Además, es rico en vitaminas A, B1, B2 y B6 antioxidantes, minerales y sustancias bioactivas. Sus excelentes valores nutricionales hacen del polen de abeja el complemento ideal en procesos de anemia, falta de apetito o retraso en el desarrollo en niños (siempre supervisado por un profesional médico).
Uno de sus beneficios más reconocidos es el aporte de energía que realiza al organismo. Al incorporarlo a nuestra dieta, especialmente en el desayuno o en ayunas, nos ayudará a tener una mayor resistencia física a la vez que reducimos la fatiga. Se ha demostrado que este complemento alimenticio, si se toma de manera continuada, mejora el estado de ánimo, aumentando la capacidad mental y fortaleciendo el sistema nervioso debilitado por el estrés.
Han quedado demostradas también sus propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y antioxidantes. Los flavonoides que contiene, así como los ácidos grasos y los fitoesteroles, le confieren estas características de manera natural, siendo un gran aliado para la salud, ayudando a prevenir afecciones intestinales o problemas tan comunes como el estreñimiento o los dolores menstruales. Además, es un buen complemento para luchar contra el envejecimiento, siendo útil también para prevenir enfermedades en las que están implicados los radicales libres.
Por último, el polen de abeja produce una actividad hipolipidémica. Es decir, disminuye el contenido de lípidos en nuestro plasma, por lo que es beneficioso para controlar los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre. Gracias a ello, mejoraremos nuestro flujo sanguíneo y nuestro sistema circulatorio, previniendo enfermedades como la arteriosclerosis u otras derivadas de esta como el infarto de miocardio. ¡Nos ayuda a tener un corazón más fuerte y sano!
¿Qué te han parecido todos los beneficios de este superalimento?¿Conocías alguno de ellos? Si has decidido que es hora de incorporarlo a tu dieta pero no sabes cómo, ¡no te preocupes! En Miel LAPUELA te damos unas cuantas ideas para tomar polen de abeja. Y si ya lo has probado, cuéntanos en los comentarios qué es lo que más te gusta de este complemento alimenticio tan especial.
